"Buscando la luz de tu estrella"
Al cielo admiro en momentos la luz de la estrella en la noche, me mira y me dirige un guiño de complicidad, vigía nocturna de tus sueños, jinete incansable de tus fantasías, sirviente segura y eterna de tu destino, impasible vidente de tus actos.
Al cielo admiro en momentos la dirección de tus pasos, al inicio de tu camino una última mirada y un beso extraviado por la distancia y el tiempo , nunca será suficiente para cerrar las heridas , nunca será bastante para acabar con tus miedos, pero será portadora de fuerza y energía, motivo fiel del sendero de tu esperanza, esperará con calma y estoica firmeza la hora en la que sus pasos coincidan para poder llorar juntos la lágrima almacenada en el último rincón de una oscura cueva.
Al cielo admiro en momentos la intensa luz que diriges a mi ventana donde cada noche te busco para poder adivinar un atisbo de tu sonrisa, un gesto de complicidad, una mueca secuaz, un serio semblante de tu lejana silueta.
Ayúdame a buscarte entre esa maraña de vidas celestes y a marcar con tu luz blanca la mirada de mi suerte que, al amanecer, la cegadora luz del sol, me hará perderte una vida más, hasta que surjas del horizonte una nueva eternidad y pueda volver a rendirme a tu oscura belleza un día más.
Al cielo admiro en momentos la intensa luz que busqué en la mirada inocente de un niño y encontré en la fría piel de tu sien.
Cuando vuelvas a visitarme márcame tu estela , te esperaré siempre.
Al cielo admiro en momentos la luz de la estrella en la noche, me mira y me dirige un guiño de complicidad, vigía nocturna de tus sueños, jinete incansable de tus fantasías, sirviente segura y eterna de tu destino, impasible vidente de tus actos.
Al cielo admiro en momentos la dirección de tus pasos, al inicio de tu camino una última mirada y un beso extraviado por la distancia y el tiempo , nunca será suficiente para cerrar las heridas , nunca será bastante para acabar con tus miedos, pero será portadora de fuerza y energía, motivo fiel del sendero de tu esperanza, esperará con calma y estoica firmeza la hora en la que sus pasos coincidan para poder llorar juntos la lágrima almacenada en el último rincón de una oscura cueva.
Al cielo admiro en momentos la intensa luz que diriges a mi ventana donde cada noche te busco para poder adivinar un atisbo de tu sonrisa, un gesto de complicidad, una mueca secuaz, un serio semblante de tu lejana silueta.
Ayúdame a buscarte entre esa maraña de vidas celestes y a marcar con tu luz blanca la mirada de mi suerte que, al amanecer, la cegadora luz del sol, me hará perderte una vida más, hasta que surjas del horizonte una nueva eternidad y pueda volver a rendirme a tu oscura belleza un día más.
Al cielo admiro en momentos la intensa luz que busqué en la mirada inocente de un niño y encontré en la fría piel de tu sien.
Cuando vuelvas a visitarme márcame tu estela , te esperaré siempre.
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